Tras realizar un análisis descriptivo del protocolo que se sigue en la Comunidad de Madrid con esta donación, la principal conclusión fue que es importante promocionar esta práctica porque es una donación muy fácil y sencilla y no perjudica ni a la madre ni al bebé. “Es totalmente inocua, no perjudica y podemos ayudar para hacer trasplantes de progenitores hematopoyéticos para tratar numerosas enfermedades”, explica la enfermera.
Para ella, es muy importante dar esta información en la consulta de ginecología a partir de la 24 semana de gestación y debe venir tanto por parte de los ginecólogos como de las matronas.
“La enfermería tiene un papel fundamental para explicar a las madres en qué consiste la donación, qué se va a hacer con la sangre, dónde va a ir…”, subraya.
Asimismo, Maestud resalta que si a veces la sangre del cordón umbilical no puede ser utilizada para tratar enfermedades, siempre se puede donar con fines científicos. “En los últimos tiempos se están utilizando las células madre del cordón umbilical para estudios acerca del párkinson y de numerosas enfermedades como la diabetes”, manifiesta.
Ángel M. Gregoris